Esta es la historia de un hombre de 30 años de edad que se peleó con sus padres. Pero no es cualquier historia, sino una muy particular: la de un señor que no quería mudarse de la casa de sus progenitores, y que entonces decidió demandarlos judicialmente. Sí, así como leen.
[post_page_title]De acá no me voy[/post_page_title]
Michael Rotondo es un hombre de 30 años de edad que vive con sus padres y que se negó a mudarse de su casa familiar. No nos malinterpreten, estamos a favor de que los padres ayuden a sus hijos cuando la economía no les permite mudarse, pero esto fue demasiado.
Y es que si siguen leyendo seguro descubrirán cómo se dieron las cosas y se darán cuenta de lo que puede hacer una persona con tal de vivir con sus padres y ahorrarse dinero.