[post_page_title]El peor huésped[/post_page_title]
Bueno, y acá una de las gotas que rebalsó el vaso. Michael no solo no buscaba trabajo por su cuenta sino que tampoco ayudaba a sus padres con los quehaceres del hogar. ¡Qué tupé!
Y, lógicamente, esta actitud del treintañero se empezó a notar y, como era de suponer, comenzó a molestar bastante a sus padres. No les gustaba para nada esta forma de ser que tenía su hijo, entonces intentaron hacerlo cambiar. ¿Cómo? ¿Qué hicieron al respecto?