[post_page_title]Perdió Su Bote[/post_page_title]
Después de su segundo encuentro con los Sentineleses, Chau se quedó sin medio para volver al barco de pesca. Mientras estaba ocupado cantándoles una canción, integrantes de la tribu se escabulleron hacia la playa y le robaron su kayak, por lo que tuvo que nadar de regreso al barco de pesca.
Esa noche escribió en su diario que temía por su vida, pero que tenía que regresar para difundir la palabra de Jesús. El joven sostenía que valía la pena perder la vida si eso significaba que estas personas se acerquen a su religión.